A medida que el mundo evoluciona la pasión por los vehículos de época aumenta. Todas las marcas han presentado sus modelos neoclásicos que en la mayoría de casos son inspirados en las motos de los años 70. Husqvarna es más atrevida y nos presenta su interpretación de una Cafe Racer diseñada desde cero y con un concepto vanguardista con un fuerte carácter estético y mucha personalidad.
La marca sueca que ahora hace parte del grupo KTM ha incursionado en el mercado de las motos de calle con apuestas radicales y fuera de lo común, con inspiración retro pero de líneas modernas basadas en mecánicas confiables y deportivas de la serie Duke de la marca naranja. De ahí nace la Vitpilen 701, la mayor de la Cafe Racer que toma el motor de la Duke 690 garantizando así deportividad para satisfacer a usuarios exigentes que buscan estilo y prestaciones antes que funcionalidad.
DISEÑO
Los diseñadores de Husqvarna se salieron de todo concepto, su apuesta es muy atrevida con su serie neoclásica, pues aunque la Vitpilen se considera Cafe Racer, no fue inspirada en las motos que iniciaron esta escena hace más de medio siglo, de ahí simplemente se toma la posición de manejo pero todas sus líneas son vanguardistas, limpias y diferentes a todo lo que hay en el mercado, una interpretación moderna de una cafe racer. El resultado es una moto con gran personalidad que no pasa inadvertida, radical, pensada para la diversión en solitario, pues aunque tiene lugar para dos ocupantes, el pasajero dispone de poco espacio y una posición muy radical que hará que solo unos pocos se atrevan a ser acompañantes. Se destacan las formas del depósito de combustible, planas en la parte superior y los laterales con plásticos que se extienden como una sola pieza hasta el colín, divididos sutilmente con una línea amarillo limón que separa los tonos plateado y negro. La iluminación es full Led con farola redonda con un aro para la luz diurna o DRL y un stop de bonito diseño y alta luminosidad. La Vitpilen, como una moto premium, cuenta con bonitos detalles como el tapón del depósito de combustible mecanizado con el logo de Husqvarna, pletinas de dirección en aluminio mecanizadas con el logo de Vitpilen además del tapizado del asiento que lleva grabado también el logo de la marca.
MOTOR
Utilizando el mismo propulsor monocilíndrico de la Duke 690, un motor de 693 cc de 4 válvulas que entrega 75 CV a 8.000 rpm y un par máximo de 74 Nm a 6.750 rpm las prestaciones están aseguradas, es un motor con mucho picante cuando lo llevas arriba de vueltas donde se siente a gusto. La potencia se transmite a la rueda trasera mediante una caja de 6 marchas con cambio semiautomático Quickshifter muy precisa y de relaciones largas con muy buena estirada final que te permite superar los 200 km/h.
ELECTRÓNICA Y PARTE CICLO
La Vitpilen es una moto de marcado carácter deportivo pero a la vez es minimalista, en electrónica solo equipa el embrague antirrebote de accionamiento hidráulico, el cambio semiautomático o Quickshifter con el que puedes subir y bajar de marcha sin usar el embrague, control de tracción y los frenos ABS. El chasis multitubular en acero al cromo molibdeno de alta resistencia te aporta la rigidez al momento de trazar curvas a alta velocidad siendo una moto muy equilibrada gracias también a su suspensiones, la delantera es una horquilla telescópica hidráulica invertida de 43 mm de diámetro, regulable, firmada por WP que trabaja en conjunto con un monoamortiguador trasero también WP regulable en precarga. De la frenada se encarga un disco de 320 mm adelante con pinza de anclaje radial de 4 pistones y atrás un disco de 240 mm con pinza de un pistón, todo el sistema firmado por Brembo con ABS 9M+ de doble canal y desconectable.
EN MARCHA
Personalmente la Vitpilen me encanta, me parece una moto con una apariencia muy fuerte, llamativa y con mucha personalidad, es una moto alta, con un asiento duro ubicado a 830 mm y una postura de manejo radical, con el peso apoyado sobre las muñecas y estriberas altas y atrasadas, para muchos es algo incómoda, para mí es ideal ya que te entrega mucha precisión a la hora de enfrentarte a carreteras de curvas y autopistas rápidas. El cuadro de instrumentos te da la bienvenida y el motor cobra vida después de un toque del botón de arranque. Su sonido al ralenti no es muy agradable pero en marcha se escucha muy bien, además cuando subes de vueltas y cambias de marcha, su carácter se torna emocionante. El acelerador electrónico es muy preciso y de corto recorrido, esto le suma a su deportividad ya que no requiere de ningún esfuerzo o movimiento exagerado de tu mano derecha.
En ciudad es una moto ágil, fácil de llevar y ratonera, tiene un buen radio de giro que te permite hacer maniobras en espacios reducidos sin problema. En el tráfico denso es donde la postura puede generarte algo de incomodidad obligándote a enderezarte cada vez que te detienes ante la luz roja. Con un par motor por arriba de las 6.750 rpm es una moto que te pide acelerador, debes llevarla al menos al 50% de este régimen para que el motor se sienta tranquilo, por debajo de las 3.000 es algo flojo por lo que seguramente a baja velocidad debas circular siempre en primera marcha. Como siempre, luego de nuestro recorrido urbano buscamos la carretera para encontrar el ambiente natural de nuestra invitada.
Autopista y carreteras de montaña, es una moto deportiva de calle, no es la súper sport para llevar a la pista aunque también puedes hacerlo. Nuestra primera ruta comprendía unos 300 km de ida y vuelta solo por vías de montaña con asfalto en excelente estado. En este escenario difícilmente utilizarás más de cuatro cambios, la aceleración en el régimen correcto hace que sea una moto muy rápida, que puedas llevar a unos 150 km/h en cuarta marcha donde el par motor te permite hacer adelantamientos con toda seguridad y sin riesgo de quedarte a mitad del camino. En las zonas trabadas de curvas la rigidez de la parte ciclo te asegura la diversión, es una moto que cruza con mucha facilidad y se mantiene pegada al asfalto, no hay flaneos ni algún otro movimiento extraño, además, las llantas que monta de serie, Bridgestone Batlax S21 son muy pegajosas y te ofrecen seguridad en toda su zona de contacto. Adelante monta solo 1 disco de freno pero se destaca su precisión, es de muy buen tacto y excelente mordiente lo que hace que sin esfuerzo alguno la moto se detenga con seguridad y sin que notes de ausencia de un segundo disco. Primera prueba superada.
La segunda ruta fue de más de 500 km de ida y regreso que se hacen prácticamente en el mismo tiempo ya que comprende más kilómetros en autopista. Este fue el momento para buscar la velocidad máxima. Sobre una recta con todas las condiciones para superar los límites, nos damos a la tarea de hacerlo, desafortunadamente una mala elección del casco (más estética que funcional), nos limitó al pasar los 190 km/h, pues con la fuerza del viento se pegaba al rostro haciendo difícil la conducción, alcanzamos a ver 193 km/h en 5 marcha lo que nos garantiza superar la barrera de los 200 kilómetros por hora, una excelente cifra para un motor monocilíndrico, que cabe destacar que es el más potente que se fabrica actualmente. La ruta no tomó en buena parte en la noche y aquí se destaca la iluminación, es la primera moto neo retro que he probado (junto con sus hermanas menores) a la que le sirve la farola, no es solo bonita sino también funcional pues tiene una excelente proyección y luminosidad que te permite visualizar el camino incluso en zona de curvas con seguridad para no perder el ritmo. Más de 4 horas sin detenernos nos permite resaltar otro aspecto, el asiento, aunque es duro, no se deforma con el paso del tiempo y no te pasa factura, a pesar de llevar morral a mi espalda, hice todo el recorrido sin necesidad de parar a descansar de mi trasero.
La Husqvarna Vitpilen 701 es una moto hermosa, de excelentes acabados y gran carácter, uno de esos vehículos pasionales que aunque sea superada en funcionalidad por muchas de sus rivales, tiene ese estilo para quienes buscan personalidad y estatus.